En el campo de la medicina estética, uno de los avances más notables en los últimos años ha sido el tratamiento de reposición de volúmenes faciales, también conocido como Full Face. Este enfoque integral y personalizado tiene como objetivo restaurar las estructuras perdidas por el paso del tiempo, la genética o factores ambientales. Mediante el uso de técnicas no invasivas, los tratamientos de reposición de volúmenes faciales pueden mejorar la armonía y la proporción del rostro, dándole un aspecto más joven, fresco y rejuvenecido.
¿Qué es el tratamiento Full Face?
El tratamiento Full Face se basa en una combinación de procedimientos que buscan restaurar el volumen perdido en distintas zonas del rostro, como los pómulos, las mejillas, el contorno mandibular, la zona de las sienes y la zona periorbital (alrededor de los ojos). A medida que envejecemos, nuestro rostro experimenta una disminución en la producción de colágeno y ácido hialurónico, lo que provoca la flacidez de la piel y la pérdida de volumen en áreas clave del rostro. El tratamiento Full Face tiene como objetivo restaurar este volumen perdido, dando como resultado una apariencia más juvenil y equilibrada.
¿Cómo se realiza el tratamiento Full Face?
El Médico Estético realizará un análisis detallado del rostro del paciente y tras la valoración presentará al paciente un plan de tratamiento detallado, donde se determinan y marcan las áreas faciales a tratar, así como las zonas que se podrían mejorar. A partir de ahí, se procede a aplicar el tratamiento más adecuado para cada zona del rostro.
Para los pómulos, se utilizan rellenos de ácido hialurónico para realzarlos y reposicionarlos de manera natural, devolviendo su volumen y forma original. En las zonas con pérdida de volumen, se emplean diferentes técnicas y productos de relleno, adaptados a las necesidades específicas de cada paciente.
A continuación, se trabaja en suavizar las arrugas del rostro, especialmente en la frente, alrededor de los ojos y el área del mentón, aplicando Toxina Botulínica, Bótox, ácido hialurónico u otros productos según requiera cada caso.
En la zona de los labios, se puede realizar un tratamiento para aumentar el volumen de labios o marcar su perfil, con el fin de resaltarlos y darles un aspecto más proyectado.
Finalmente, se aplica toxina botulínica en las áreas perioculares y en el entrecejo para lograr un aspecto más relajado y rejuvenecido.
Tras el tratamiento, aproximadamente una semana después, el paciente podrá notar cómo su rostro se ve más fresco, natural y luminoso, con un rejuvenecimiento visible y una mejora en la armonía facial.
Tipos de rellenos para reposicionar volúmenes faciales
- Rellenos dérmicos (ácido hialurónico, hidroxiapatita cálcica, poliláctico): Los rellenos dérmicos son productos inyectables que se utilizan para restaurar el volumen perdido. Los más comunes son aquellos a base de ácido hialurónico, una sustancia que ya está presente de forma natural en el cuerpo humano. Dependiendo de la zona y el tipo de resultado que se desee, se utilizan diferentes tipos de rellenos, cada uno con una textura y densidad específica.
- Bioestimulación con PRP (Plasma Rico en Plaquetas): El PRP es un tratamiento en el que se utiliza la sangre del propio paciente para estimular la producción de colágeno y elastina en la piel. A través de pequeñas infiltraciones, el PRP ayuda a mejorar la calidad de la piel, aumentar la firmeza y regenerar los tejidos de forma natural.
- Lipofilling o injerto de grasa autóloga: Este tratamiento implica extraer grasa del propio paciente, generalmente de áreas como el abdomen o los muslos, y reinyectarla en el rostro para restaurar el volumen perdido. Es una opción natural y duradera, ya que se utiliza el propio tejido adiposo del paciente.
Beneficios del tratamiento Full Face
- Rejuvenecimiento integral: A diferencia de los tratamientos tradicionales que se centran solo en una zona del rostro, el tratamiento Full Face ofrece una mejora global, lo que permite que las distintas áreas del rostro trabajen en armonía para conseguir un aspecto más juvenil y equilibrado.
- Resultados naturales: Una de las mayores ventajas del tratamiento Full Face es que, al ser personalizado y adaptado a las necesidades de cada paciente, los resultados son extremadamente naturales. El objetivo es restaurar la forma original del rostro, no alterarla.
- Recuperación rápida: Al ser un tratamiento mínimamente invasivo, los pacientes suelen experimentar poco tiempo de recuperación. En la mayoría de los casos, se pueden retomar las actividades diarias con poco o ningún malestar después de las sesiones.
- Larga duración de los resultados: Dependiendo del tipo de tratamiento y las técnicas utilizadas, los resultados pueden durar entre 12 y 24 meses, lo que permite a los pacientes disfrutar de un aspecto más rejuvenecido durante un período prolongado antes de necesitar retoques.
¿Quiénes son los candidatos ideales para un tratamiento Full Face?
El tratamiento de reposición de volúmenes faciales es ideal para personas que experimentan una pérdida de volumen facial debido al envejecimiento, pero también puede ser útil para aquellos que desean mejorar ciertas características del rostro desde una perspectiva estética. No hay una edad específica para comenzar, pero las personas de mediana edad suelen ser las más propensas a beneficiarse de este tipo de tratamiento.
Es importante destacar que el tratamiento debe ser personalizado según las necesidades de cada paciente, ya que no todas las personas tienen el mismo tipo de rostro ni las mismas preocupaciones estéticas. Por eso, un análisis exhaustivo realizado por un especialista en Medicina Estética es esencial para garantizar un tratamiento eficaz y seguro.
El tratamiento integral de reposición de volúmenes faciales Full Face representa un avance significativo en la medicina estética moderna. Su capacidad para devolver la juventud y armonía al rostro de manera no invasiva y con resultados naturales lo convierte en una de las opciones más populares para quienes buscan mejorar su aspecto sin recurrir a procedimientos quirúrgicos complejos. A medida que la medicina estética sigue evolucionando, tratamientos como el Full Face seguirán ofreciendo soluciones personalizadas y efectivas para mantenernos jóvenes y radiantes a lo largo del tiempo.
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