Lucir una piel deslumbrante y resplandeciente es importante en todas las estaciones del año. La apariencia de una dermis bonita no solo ayuda a rejuvenecerla, si no que también es un síntoma de una piel sana y llena de vitalidad.
Sin embargo, con la llegada del calor, los cuidados que exige la dermis son muy diferentes a los que ésta puede necesitar en cualquier otra estación.
Dentro de los diferentes tipos que existen, la piel seca es la que más cuidados suele exigir. El calor y las altas temperaturas traen consigo un aumento tanto de la tirantez como de la sensación facial acartonada y, por lo tanto, las rutinas de cuidados faciales durante la época estival requieren más atención de lo habitual.
Además de apoyarte en los tratamientos de medicina estética que ofrecemos en nuestra clínica, como por ejemplo la mesoterapia con vitaminas o el rejuvenecimiento facial, estos consejos y recomendaciones ayudarán a tu piel a lucir brillante y reluciente incluso en verano.
Cómo cuidar la piel seca durante el verano
La delicadeza de la piel seca provoca ciertas preocupaciones en los pacientes de Cliniem. Por ello, durante los meses previos al verano intentamos hacer hincapié en cómo cuidar la piel para que ésta no se vea afectada por las consecuencias del calor.
El foco principal de todas aquellas personas que tienen este tipo de piel es evitar que ésta se deshidrate y se apague durante los meses en los que las altas temperaturas son las grandes protagonistas.
Te contamos cuáles son las claves para combatir todos aquellos factores que provocan picor, molestias o tirantez en tu rostro y qué pasos incluir de forma obligatoria en tu rutina diaria de skin care para piel seca en verano.
Presta atención a la limpieza del rostro
Uno de los pasos esenciales en una rutina de cuidados faciales, sea la estación del año que sea, es la limpieza del rostro. Sin embargo, mantener la cara más limpia de lo normal es una exigencia de la piel seca en verano ya que, por norma general, la dermis se ensucia mucho más en esta época.
La arena de la playa, el agua manipulada de las piscinas… Todos estas actividades unidas al posible viento y a los diferentes agentes contaminantes es lo que provocan una mayor suciedad en el rostro.
Ese es el motivo principal por el que lo primero que se tiene que tener en cuenta es la limpieza exhaustiva.
Incluir exfoliación en la rutina facial
Una vez que ya tenemos claro que la limpieza es esencial, no podemos dejar de lado lo imprescindible que es la exfoliación.
Eliminar las células muertas y deshacernos de todas aquellas impurezas nos permitirá sentir como la piel se encuentra mucho más liberada y preparada para absorber, al máximo, las cremas de hidratación.
Incluye este paso de forma periódica en tu rutina de cuidados.
Mantener la piel hidratada en todo momento
Si la piel seca demanda hidratación con el frío, con el verano lo hace de una forma mucho más exigente.
Una vez que tengas el rostro limpio, llegó la hora de hidratarlo. Intenta buscar una crema con efecto extra de hidratación y capaz de retener la humedad lo máximo posible.
No te olvides de la importancia de este paso y repítelo, como mínimo, dos veces al día.
Proteger la piel del sol
Además de hidratar la dermis con cremas hidratantes especiales para piel seca, la protección solar es un paso que no puedes saltar.
Este punto es de los más importantes tanto para combatir las manchas y el melasma como para evitar los daños que los rayos del sol provocan en la piel seca.
Recuerda que los protectores solares idóneos son los que tienen una protección de 50 SPF+.
Utilizar productos adaptados a la piel seca
A pesar de ser una obviedad, la importancia de recordar que utilizar productos especializados en cuidar y tratar la piel seca nunca está de más.
Este tipo de productos se encarga de velar por los intereses de esta dermis y de mantenerla radiante.
Alimentación saludable
Seguir una alimentación saludable también es relevante en los cuidados de la piel en verano. Los alimentos antioxidantes y ricos en minerales y vitaminas son imprescindibles en estos meses en los que el calor puede llegar a deshidratarnos.
Beber agua en grandes cantidades
La hidratación corporal interior es casi tan importante como la exterior. Hidratarse desde dentro será una de las formas más idóneas de mantener el cuerpo hidratado en todo momento.
Los alimentos ricos en agua, como la sandía o el melón, también son perfectos para hidratar al cuerpo.
Realizar tratamientos con vitaminas
Realizarse tratamientos con los que aumentar el grado de hidratación facial es vital en verano. En nuestra clínica de medicina estética ofrecemos técnicas de punción seca con las que aportar vitalidad y vitaminas al rostro sin invasión.
En definitiva, seguir al pie de la letra todas estas recomendaciones será la forma perfecta de mantener a tu piel lejos de las invasiones productos tanto por el calor como por los rayos del sol.
Pide tu cita de valoración gratuita en Cliniem y comenta con nuestros especialistas qué tratamiento es el más idóneo para favorecer tu piel seca este verano.